Qué zapatos elegir para viajar en avión

Un viaje en avión implica cierta incertidumbre. Nunca sabemos si el vuelo va a salir a la hora prevista, si tendremos que esperar muchas horas en el aeropuerto o cuál va a ser el espacio en cabina. Aquellos que acostumbren a viajar en avión seguramente se preparen a conciencia a fin de superar cualquier tipo de improviso, si bien nunca está de más repasar algunas de las claves a la hora de escoger nuestra vestimenta y por supuesto el tipo de calzado.

Cómo vestir en los viajes largos

Para aquellos que valoran el buen vestir, subirse a un avión puede convertirse en una experiencia un tanto frustrante, especialmente si se trata de un trayecto largo. En estos casos, es recomendable escoger la comodidad a los looks demasiado sofisticados, lo cual no tiene que ser sinónimo de atuendos de sport. Hay que tener en cuenta que, una vez lleguemos a nuestro destino, siempre tendremos la oportunidad de cambiarnos de ropa si las circunstancias exigen ir de etiqueta.

Por lo general se aconseja llevar prendas que sean transpirables, de algodón o lino, aunque cuidado pues éste último se arruga con facilidad. Unos joggers discretos, unos chinos o unos pantalones vaqueros pueden combinar a la perfección con un polo o una camisa, lo cual nos garantiza la elasticidad y la amplitud necesaria para viajar de manera confortable.

Respecto al calzado, los mocasines de hombre resultan ideales por varias razones. En primer lugar, al carecer de cierre, oprimen menos y no resultan tan incómodos como unos zapatos con cordones, especialmente si se nos hinchan los pies. Por otro lado, nos los podemos quitar con facilidad en caso de que en algún momento sintamos la necesidad de descalzarnos.

Aunque los mocasines de vestir siempre son la opción más elegante, si nos encontramos en los meses de primavera y verano los zapatos drivers se imponen como la elección más lógica. Son muy ligeros, con una suela de goma de gran flexibilidad y además cuentan con un diseño muy desenfadado que los hace muy atractivos si nos disponemos a disfrutar de nuestras vacaciones. El estar hechos para pasear, podremos bajarnos del avión y comenzar a hacer turismo sin necesidad de sustituirlos.

Para los meses de calor también existe una alternativa intermedia, la de los mocasines de verano. Estos zapatos, mucho más livianos que los de la temporada otoño-invierno, cuentan con una suela de cuero muy fina y transpirable, que no se recalienta tanto como las de goma. Su versatilidad está fuera de toda duda, pues además lucen una línea más sofisticada que la de la mayoría del calzado estival.

Cómo vestir en los viajes de corta distancia

Es evidente que no es lo mismo preparar nuestro atuendo para un viaje que nos supondrá estar sentados durante muchas horas que uno en el que el trayecto sea más breve. En estos casos, lo mejor es atender al estilo que nos exija el motivo de nuestro desplazamiento, por lo que si se trata de un viaje de negocios sí que nos podremos permitir llevar un traje y unos zapatos acordes con los estándares formales, por ejemplo unos zapatos Oxford en negro o en burdeos. Por supuesto habrá que cuidar ciertos detalles una vez estemos en cabina como quitarnos la chaqueta y si fuera posible colgarla o plegarla de manera adecuada.

Si se trata de un viaje por placer, los mocasines de vestir o los zapatos drivers de verano vuelven a ser las elecciones más lógicas en términos de confort. En todo caso, habrá que atender al tipo de clima de nuestro lugar de destino a la hora de optar por un calzado más o menos abrigado, e incluso uno que nos asegure cierta impermeabilidad.

¿Qué ponerse cuando nos dirigimos a un lugar con temperatura diferente?

Esta situación es de lo más común cuando se trata de viajar en avión, con el que es posible cubrir grandes distancias en cuestión de horas. Si nos aguarda un destino más frío que el del lugar de partida, es recomendable meter en la maleta unas buenas botas de piel. Se trata de un calzado rígido y que se ajusta mucho a nuestro pié, de ahí que lo mejor sea ponérnoslo una vez aterricemos. Hasta entonces, podemos llevar un tipo de zapato como los derby, que al tener un cierre en dos alas no oprime el empeine, y que además han sido confeccionados con materiales que ofrecen una mayor protección frente a las bajas temperaturas.

Si por el contrario nos dirigimos a un destino más caluroso, deberemos viajar con un outfit acorde con este clima incorporando una chaqueta ligera de la que nos podamos desprender en cualquier momento. Tendremos que acompañarlos con unos zapatos de carácter neutro como unos náuticos y que más adelante podremos reemplazar por unos mocasines de verano o unos drivers, los cuales podremos llevar con o sin calcetines.

Otros aspectos a tener en cuenta

Aquello de que siempre es mejor viajar ligero también va ligado a nuestra vestimenta. Recordad que salvo en viajes en business o en primera clase, el espacio en cabina siempre es reducido por lo que no tiene mucho sentido que elijamos un atuendo cómodo si luego vamos a excedernos en cuanto a equipaje de mano y complementos innecesarios. Tenemos que tener en cuenta que hay que pasar por múltiples controles de seguridad y aduanas, por lo que es aconsejable llevar encima el menor número de cosas posibles. También que nuestros zapatos de vestir carezcan de hebillas o de cualquier otro tipo de adornos metálicos y que como sucede con los mocasines sean muy fáciles de quitar y poner.