Los zapatos con hebilla hombre, también llamados monkstrap, basan su atractivo en la aparente sencillez de su diseño, que le confieren un estilo muy propio y actual más allá de su indudable carácter funcional.
El nombre de estos zapatos de vestir hace referencia a las sandalias que calzaban los monjes y que contaba con un cierre en el empeine muy similar. De hecho, se caracterizan por contar con una empella lisa y dos cañetas en las que se ajustan la hebilla y el prendedero respectivamente.
La facilidad para abrocharlos y la extrema adaptabilidad a cada tipo de pie convierten a los monkstrap en unos zapatos cómodos y muy gratos de vestir. Es más, su estilo se encuentra a medio camino entre los Oxford, un calzado considerado más formal, y los mocasines, muy urbanos, por lo que hablamos de un concepto híbrido que les confiere un encanto especial.
Existen muchas variantes, principalmente si han sido confeccionados con hebilla simple o doble y también en función de la forma de éstas, que pueden ser cuadrangulares o ligeramente redondeadas. También difieren en el color, ya sea en los muy diversos tonos de marrón disponibles o en el siempre demandado negro, y en los materiales, pues algunos lucen la exclusiva piel Du puy boxcalf mientras que otros son fabricados en ante, una opción para auténticos amantes de estos zapatos artesanos.
Hablamos de un calzado con mucha personalidad, que sabe destacar entre el resto de zapatos de estilo inglés y enamora por esa pala larga y estilizada que invita a lucirlos con traje o con un atuendo más casual.